Control de peso: tips para llegar a tu peso ideal

Llega un momento en nuestra vida en el que tenemos que vigilar el nivel de colesterol y de azúcar en la sangre. Más allá de nuestra estética, que también es importante para mantener una buena autoestima, tenemos que realizar un control de peso por nuestra salud. ¿Cómo lo hacemos?

Mantener un adecuado control de peso es algo que cada vez preocupa a más personas, y no es para menos. Evitar el exceso de peso nos garantiza, además de una mejor apariencia física, una mejora de la salud en cifras de presión arterial y colesterol, así como una gran disminución del riesgo de padecer diabetes. De hecho, se considera que la pérdida de peso es una buena estrategia para controlar la diabetes tipo 2.

Qué hacer para conseguir un adecuado control de peso

Debido a que a veces nos obsesionamos con el control de peso o desconocemos cuáles son las medidas más apropiadas que debemos seguir, lo más importante es acudir a un profesional especialista en dietética y nutrición para poder alcanzar nuestros objetivos de una forma óptima y saludable.

Partiendo de esa base, para saber si tienes un peso saludable, lo primero que tienes que hacer en calcular tu IMC, es decir, tu índice de masa corporal. Para calcularlo tienes que dividir tu peso (en kilos) por tu estatura( en metros) al cuadrado. Si el IMC es de 25 o más, ya se considera que supera tu peso saludable. Aunque tienes que tener en cuenta que es un cálculo aproximado en el que influyen aspectos como la edad, la masa muscular, la estructura ósea de cada persona, el sexo, etc.

Aunque nos han repetido hasta la saciedad que una de las claves para el control de peso es no ingerir más calorías de las que puedes quemar a lo largo del día, esto es algo que en la práctica no podemos cumplir. Por eso debes seguir consejos de un profesional.

Una vida activa para el control de peso

Por este motivo, debemos recurrir al ejercicio físico como medida principal para contrarrestar los efectos de una vida sendentaria. Esto no solo nos sirve para controlar nuestro peso, sino para beneficiarnos de innumerables beneficios. Te notarás con más energía, con mejor ánimo y hasta con más autoestima.

Además, si no te mueves lo suficiente, lo poco que ingieras lo absorberá tu cuerpo y no perderás peso.

Una dieta sana y equilibrada

Elige alimentos bajos en grasas, pero sin excluir el consumo de ningún alimento básico saludable ni saltarte ninguna de las 5 comidas diarias. Por ejemplo, para la media mañana y la merienda, opta por alimentos con mucha fibra y proteínas (fruta, yogures desnatados, cereales de avena y trigo…).

En cuanto a los carbohidratos, consúmelos por la mañana o al mediodía y bebe 2 litros de agua diarios.

Descansa 8 horas

Dormir menos de seis horas puede llegar a aumentar hasta un 31% del peso al año, según un estudio de la Universidad de Harvard.

¡En marcha!

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