Las infecciones de oído u otitis suelen ser más comunes en los niños, sin embargo hay periodos en los que los adultos pueden sufrirlas también con más frecuencia. El verano es precisamente uno de esos momentos porque se dan una serie de circunstancias que pueden propiciar su aparición.
Así dado que son frecuentes los baños en las piscinas, lagunas, lagos o el mar donde el agua suele estar muy fría, el conducto auditivo puede recibir el impacto del líquido y padecer una infección o inflamación en la zona, que puede resultar muy dolorosa. También es posible que no hayamos tomado las medidas de precaución necesarias y las aguas que hayamos escogido para darnos un chapuzón estén contaminadas o no se encuentren lo suficientemente limpias, lo que puede provocar que alguna bacteria entre por el canal auditivo.
Las otitis también pueden producirse a consecuencia de un resfriado y aunque durante los meses de más calor es más difícil que nos constipemos, es posible que esta situación se produzca. Los aires acondicionados, especialmente si están a temperaturas inadecuadas, es decir, a temperaturas demasiado bajas, pueden desencadenar esta enfermedad durante el verano principalmente por el cambio brusco de las temperaturas.
Los síntomas son muy fáciles de identificar, pues una de las primeras manifestaciones es el dolor agudo que se experimenta en la zona. A veces se sufre una secreción del oído, que suele ser de color amarillo o verde amarillento. La hipoacusia, que es la disminución de la audición total o parcial, en uno o los dos oídos, es común en algunos casos, así como picor en el conducto auditivo externo y en ocasiones con fiebre.
Lo primero que tenemos que hacer es no alarmarnos porque las otitis se pueden tratar. Como opción, puedes recurrir a la homeopatía que se ha mostrado eficaz en el abordaje de las otitis, ya que es útil para calmar el dolor y tratar otros síntomas asociados, como por ejemplo la fiebre.
Es importante actuar en cuanto se sientas los primeros síntomas, pues además de recuperarnos antes con el tratamiento adecuado el dolor, que es uno de las manifestaciones más molestas, tenderá a remitir en unos días. La homeopatía es apta para los niños también y para toda la familia, de modo y puedes usarla en estos casos sin miedo a sufrir efectos secundarios adversos.
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