En tu hidratación diaria, no te olvides de los codos

La piel que recubre nuestros codos suele ser más gruesa generalmente por tratarse de una articulación en movimiento. Si además le sumamos que continuamente nos apoyamos en diferentes superficies para leer, escribir, ver la TV o sujetarnos la cabeza…, es normal que esta zona necesite más hidratación que otras partes del cuerpo. Suele sufrir de deshidratación con mayor facilidad presentando un aspecto más rugoso y áspero en muchos casos debido a esa fricción a la que está sometida la zona.

Consejos para mantener la hidratación de nuestros codos

Se trata de una zona que cuidamos menos, de ahí que se agriete, se reseque o sufra de deshidratación. En algunos casos suele provocar hasta picores. Lo mejor es la hidratación con lociones o cremas hidratantes que nos ayuden a restablecer la piel pero previamente es recomendable exfoliar la zona para eliminar esas células muertas y que la crema hidratante penetre mejor regenerando células nuevas. Nuestro consejo: exfoliar la zona una vez por semana, dependiendo del estado de la misma. Notarás una piel más uniforme, con aspecto más saludable y conseguirás activar la circulación de la piel.

El segundo paso sería la hidratación. Una hidratación diaria es necesaria para que los codos suavicen su aspecto y tengan un aspecto más sedoso, sano y saludable por más tiempo. El mejor momento para aplicar la crema hidratante sería después de la ducha pero cualquier momento es bueno para la hidratación de los codos, lo importante es que no te olvides de ellos en tu rutina diaria. Nuestro consejo: cuando utilices tu crema hidratante de manos habitual, extiéndela también por los codos, conseguirás una hidratación diaria casi sin esfuerzo.

Nutrición nocturna. Aporta una hidratación extra a tus codos un mínimo de 3 veces por semana con cremas más nutritivas por la noche. Puedes utilizar tu crema hidratante/nutritiva habitual antes de irte a dormir. Nuestro consejo: los aceites como el de coco o de almendras van fenomenal para prevenir la deshidratación.

Mantener una hidratación adecuada de los codos es sencillo si sigues estos 3 pasos. Añade a tu rutina de cuidado la ingesta 2 litros de agua al día que te ayudará a mantenerte también hidratado/a por dentro.

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