Con la bajada de temperaturas, la piel es la que más acucia los cambios climáticos. Te ayudamos a prepararla para este otoño.
Termina el verano y pasamos del calor al frío por las mañanas que poco a poco se extiende a todo el día. Para evitar las bajas temperaturas nos resguardamos bajo capas de ropa, y parece que con ello evitamos el problema. Sin embargo muchas veces nos olvidamos de un órgano que dejamos al descubierto y el cual puede verse afectado por estos cambios meteorológicos. La piel va cambiando a lo largo del año dependiendo de los factores externos y tras el verano notaremos la deshidratación, manchas y alteraciones en la pigmentación. Un estado con el cual será difícil plantarle cara al otoño, una época en la que descuidamos la piel por no exponerla tanto como en verano.
Para José D. Domínguez Auñón, jefe de la Unidad de Dermatología del Hospital del Henares y especialista en Dermatología, Cirugía Dermatológica y Dermatología Estética en la clínica Santa Elena de Madrid, hay una tendencia a cuidar en exceso la piel de la cara olvidando zonas como brazos y piernas que también están expuestas al frío.
Entre las recomendaciones para un cuidado total destaca el evitar una higiene excesiva. Tener la piel limpia puede ser fácil con una ducha diaria, pero cuando se utilizan demasiados jabones, con demasiada frecuencia la piel comienza a perder sus propias defensas. Como se ha apuntado la piel estará deshidratada por lo que usar una crema hidratante dos veces al día debe estar entre nuestras costumbres. Otra crema que podemos usar es la protectora solar. El sol está presente todos los días del año, no solo en julio y agosto, por lo que deberemos extremar la precaución si vamos a pasar varias horas al aire libre.
Hay hábitos beneficiosos que con el paso del tiempo los notaremos en la piel. Por ejemplo el abandono del tabaco o comenzar una dieta rica en frutas y vegetales. Estos alimentos permiten al organismo tener una fuente de vitaminas y nutrientes que favorecen al cuidado de la piel, así como a la mejora de su aspecto. En este último punto los medicamentos homeopáticos pueden jugar un papel importante. Por ejemplo el complemento alimenticio Magnesium aporta vitaminas como la P, E, B1 o B6, además de ayudar al sistema inmunitario.
Los medicamentos homeopáticos están incluidos en el consejo de los profesionales sanitarios para el tratamiento de sintomatologías en pacientes de todas las edades. En este enlace puedes consultar cuál es tu médico homeópata más cercano.
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