Uñas fuertes y sanas desde la farmacia

Las uñas son un reflejo de nuestra personalidad y de nuestro estilo de vida. Aquellas limpias y cuidadas pueden indicar que somos personas pulcras, ordenadas o con trabajos de oficina. Sin embargo, las que se ven mordidas dicen de su dueño que es nervioso o que tiene un oficio estresante, mientras que unas uñas sucias y descuidadas pueden delatar a la persona como despreocupada de su aspecto o que, sencillamente, trabaja con sus manos.

Pero más importante que todo ello es que unas uñas mal cuidadas (y no hablamos de pintadas o decoradas) pueden denotar un problema de salud en la persona que las porta.

Si están secas y quebradizas, puedes tener anemia o algún problema de tiroides; si se ven blanquecinas, alguna afección hepática o renal; si tienen rayas, puedes contar con una deficiencia alimentaria como falta de nutrientes; si son amarillentas, puede existir algún problema en el riñón, que fumas demasiado o que el quita esmalte es muy agresivo y es mejor cambiarlo; las azuladas o amoratadas indican que la afección es a nivel respiratorio o circulatorio; con las enrojecidas, la dolencia puede ser cardiovascular; si están verdosas, puede haber algún tipo de contaminación bacteriana; si tienen manchas negras, puede haber relación con el cáncer de piel, o si se muestran abultadas, la psoriasis y la tiña pueden haber hecho acto de presencia en ellas.

Es momento de acudir a tu dermatólogo cuando después de una limpieza a fondo de las uñas, tanto de manos como de pies, para descartar que no se haya eliminado bien el esmalte, alguno de estos colores persiste.

Pero para no tener que llegar a este crítico punto, es importante seguir unas rutinas de cuidado de manicura y de pedicura básicas que eviten cualquier quebradero de cabeza a tiempo y con las que consigas unas uñas perfectas:

- Limpia tus uñas a diario con la herramienta metálica destinada a este fin que incluyen algunos cortauñas o con un cepillo específico y abundante agua, tanto las puntas como toda la superficie.

- Córtalas a una medida recomendable, sin esquinas puntiagudas que favorezcan la encarnación.

- Déjalas respirar entre esmalte y esmalte.

- Evita los postizos durante periodos de tiempo muy alargados.

- No elimines la cutícula.

- Protégelas del agua con guantes cuando se prolongue su contacto con él.

Además, al cruzar la puerta de tu farmacia de confianza puedes encontrar diferentes productos indicados específicamente para cuidar uñas como:

- Repavar Endurecedor de uñas, para proteger, fortalecer y regenerar las uñas débiles y quebradizas.

- Neutrogena Manos y uñas, para fortalecerlas y suavizar sus cutículas.

- Hidrotelial Cuidado de uñas, cuando estas son frágiles, desnutridas, quebradizas y amarillas, gracias a su contenido en manteca de karité, aceite de jojoba, biotina e ichthyol pale.

- Betalfatrus Laca Tratamiento de uñas de Isdin, para remineralizarlas y reestructurarlas.

- Aceite del Árbol del Té de Valefarma, para eliminar los hongos de las uñas de los pies y de las manos.

Fotos: Kachilla, Manuelle Yosan y Mar Barcelo